Llevo unos meses sin escribir aquí y es fundamental pedir disculpas lo primero y aclarar que están siendo unos meses en los que estoy trabajando en varios proyectos que me roban tiempo, me hacen dormir por las noches en cuanto me pongo horizontal y me ilusionan como los que más. Pero la ocasión del I Encuentro Nacional de Jóvenes Emprendedores Yuzz al que asistí en Madrid este martes 14 es una buena excusa para romper este silencio. Y es que más allá de las crónicas oficiales, fotos, vídeos y demás, fue una jornada de la que sacar muchas y muy buenas conclusiones.
La primera es que a veces con tanto Yuzz en la cabeza, tanto plan de empresa, resumen ejecutivo, charlas, streamings, intercambios de opiniones con los compañeros, cosas positivas, cosas negativas, cosas que mejorar por un lado, por otro, perdemos un poco la perspectiva del programa. Estamos tan involucrados que no damos un paso atrás y vemos la cantidad de oportunidades que se nos está dando para facilitarnos la vida y para hacer posibles sueños que antes eran sólo eso, sueños. Y que es probable que de otra manera con más vueltas, con más obstáculos o de otra forma, hubieran salido adelante igual, pero tenemos suerte porque hay gente intentando ponérnoslo más fácil, sin que nos cueste nada.
Y después de un día como el del martes te das cuenta que no podemos desperdiciar todo este trabajo que está la gente haciendo por nosotros. Yo no soy más que un chaval de Santoña que de repente soy escuchado por empresarios de éxito, gente que innova en Silicon Valley, jóvenes que ya dieron el paso y están teniendo fortuna en sus aventuras emprendedoras… y que te tratan de tú a tú.
Puede que lo que salga en los titulares de los medios sean declaraciones de Antonio Basagoiti (presidente de la Fundación Banesto), del alcalde de Madrid Ruiz Gallardón o del gran seleccionador Vicente del Bosque que tuvieron a bien soltarnos sus discursos. Puede que dentro de unos años me ría aún recordando las bromas de Gomaespuma durante la presentación. Pero lo que es seguro que me ha abierto la mente, me ha hecho cargar la energía a tope y probablemente me brinde nuevas oportunidades en el futuro es poder compartir mi tiempo con gente como el emprendedor Xavier Verdaguer (@xavierverdaguer), charlar con un crack como Álvaro Sanmartín de Netday (@alvarosanmartin), disfrutar de los consejos de Patricia Araque (@patriciaaraque) o darme cuenta de que siempre hay que preguntar antes de ponerse a tuitear delante de alguien por si le puede molestar, porque puede ser una falta de respeto (muy 2.0) como me demostró un gran Daniel Seseña (@danisesena), del programa Cámara Abierta 2.0 de TVE.
Y por supuesto sin olvidar a todos esos otros jóvenes Yuzz de toda España que nos reunimos allí y con los que pude charlar, intercambiar ideas, tarjetas, proyecto futuros… Como dice Pau García-Milà (@pau) en su libro, queda todo por hacer, y somos muchos como se comprobó en Madrid con ganas de ir haciendo, de colaborar y de hacer un mundo más fácil para el resto de la gente. El #yuzzday fue una experiencia muy positiva, y espero poder repetir en el futuro y mantener contacto con muchas de estas jóvenes mentes llenas de ideas y sobre todo, de ilusión y ganas de trabajar.
Una reacción a “Mi #yuzzday: Mucho por hacer, muchos para ayudar”