Retomo el blog con el mismo tema que lo abandoné: la música. Consideraremos los lunes como el día musical, e intentaré no quedarme estancado en los discos de siempre para poder tener algo que contar, como en los viejos tiempos. Porque aunque no haya dejado de escuchar música día sí, día también (gracias a mis al-fin-tengo-unos cascos geniales) ya avisé en su momento que me estaba quedando sin hypes. Por suerte, se terminó el 2011 y todo Internet decidió lanzarse al apasionante mundo de crear listas de lo mejor del año. Ahora tengo unos meses para ponerme al día de lo que pasó y ver si cada vez me alejo más de los gustos de mis amigos de Al Norte del Norte, de la gente de Jenesaispop, de los moderneos de Pitchfork o de mi gurú-de-las-descargas de Indiecaciones.
Por mi parte, no tengo suficiente recorrido en lo que se publicó en el ya acabado 2011 como para poder hacer mi propia lista ordenada de mira-que-cool-soy-que-estoy-a-la-última-de-todo pero pronto empezará el camino para poder hacerlo en 2012. O al menos, intentaré tener el scrobbling encendido todo el día para que last.fm haga su trabajo y me evite quebraderos de cabeza.
De discos españoles, sin duda me quedo con «La Polinesia Meridional» de La Casa Azul. Finalmente Guille me ha convertido en uno de ellos, después de tardar años en pasar por el aro. Poco a poco, al principio era un rechazo absoluto, después fue un ‘alguna canción en algún momento’, para pasar a un ‘este disco mejor’ y terminar conmigo cantando de inicio a fin este último trabajo que merece muy mucho la pena.
De discos internacionales, que es donde siempre me he movido mejor, mis recomendaciones (también llamadas ‘los discos con los que he martilleado a la gente a mi alrededor‘) son el nuevo y serio trabajo de Arctic Monkeys, «Suck It And See«, el «Velociraptor» de Kasabian, el divertido (y poco profundo, pero divertido) «La Liberación» de Cansei de Ser Sexy, el alegre «Forever Today» de I’m From Barcelona, «In the Grace of Your Love» de The Rapture y también algún que otro descubrimiento como el «What Did You Expect From The Vaccines» o el «Belong» de The Pains of Being Pure at Heart.
Y sí, ya sé que medio mundo recomienda el disco de Bigott como el mejor nacional, o el de PJ Harvey, Girls, James Blake, The Black Keys o Bon Iver como mundiales, pero… tiempo al tiempo, que el año es muy largo y yo tengo muchas horas de música por delante.