Después de una semana lluviosa (y de vuelta al frío) parece que el cielo quiere ir abriendo. Sí, estoy otra vez hablando del tiempo y no sé si es metafórico o no, la verdad. Sea lo que sea, quedan cinco semanas hasta una fecha muy marcada en el calendario: el inicio de junio. Ahí todo puede cambiar (esperemos que para bien). ¡Mucho que hacer hasta entonces!
